A algunos, la palabra "superalimento" les hace pensar en Popeye y su lata de espinacas, mientras que otros imaginan coloridos y saludables platos repletos de vitaminas y vegetales. A lo largo de los años, a medida que se han ido poniendo de moda nuevos alimentos, también hemos sido testigos de la enorme repercusión social y ecológica que estos tienen en sus países de origen. El recorrido que hacen hasta llegar a nuestros estantes genera considerables cantidades de CO2, mientras pasamos por alto alimentos autóctonos que tienen tanto que ofrecer como el açai, las semillas de chía y las bayas de goji. Vamos a descubrir cómo son los superalimentos locales.
El primer nombre de la lista es el simple espárrago. Este alimento básico de la nutrición tradicional rebosa fibra, folato y vitaminas A, C, E y K. Y, por si fuera poco, también contiene un oligoelemento que favorece la producción de insulina, lo que hace que sea útil para los diabéticos.
La col rizada ya es muy conocida como superalimento por su contenido de vitaminas A, C, K, B6, calcio, potasio y manganeso. Además de esta asombrosa variedad de nutrientes, también es muy fácil de cultivar en cualquier clima con otoño frío. Para sacar el máximo sabor a esta impresionante verdura, intenta encontrarla tras la primera helada de la temporada. Es en ese momento cuando algunos de sus almidones se habrán convertido en azúcares haciendo que sea menos ácida y aún más sabrosa.
La semilla de lino es un cultivo de fibra que data de hace 30 000 años y contiene ácido alfa-linolénico omega-3. La cantidad y calidad del ácido alfa-linolénico de la semilla de lino es comparable a la de la semilla de chía, una opción mucho más popular.
Y resulta que Popeye algo sabía. Una simple hoja de espinaca contiene vitamina K, vitamina A, vitamina C y folato, además de ser una buena fuente de manganeso, magnesio, hierro y vitamina B2. Sus componentes tienen propiedades antiinflamatorias, anticancerígenas y son fundamentales para una vista sana. Por desgracia, no te dará unos enormes bíceps, pero es un superalimento común que podrás encontrar en la mayoría de los mercados.
Si te interesa comprar productos autóctonos pero no sabes por dónde empezar, busca en los mercados de productores locales. En un mundo cada vez más conectado, también es más fácil que nunca realizar pedidos a fincas agrícolas cercanas, conocer la procedencia de cada alimento y descubrir los métodos de cultivo utilizados en caso de que te interesen las opciones orgánicas. Elijas lo que elijas, asegúrate de que la calidad de los alimentos sea buena, que sean ricos en nutrientes y, lo más importante de todo: ¡que estén deliciosos!
